La implantación masiva del IoT podría llegar en 2018
2018 podría ser el año definitivo para la integración del Internet de las Cosas (IoT) en el día a día de personas y empresas. Así se desprende de diversas predicciones, en las que se coincide que el auge de esta tecnología estará íntimamente ligada al desarrollo de la Inteligencia Artificial (IA).
Las cifras apuntan a que pronto habrá alrededor de 100.000 millones de dispositivos conectados y, a no mucho tardar, se alcanzará el billón. Este hecho deparará una magnitud de datos que se deberán procesar a través de la Inteligencia Artificial, lo que ayudará a gestionar mejor nuestros recursos físicos y humanos. Los seres humanos serán 'conductores digitales' de la tecnología y de los entornos que nos rodean.
Un buen ejemplo se encuentra en el sector de la automoción. Diversas mejoras, como el uso de una tecnología que utiliza rayos de luz para medir la distancia entre los vehículos, se encaminan a alcanzar en un futuro próximo la conducción autónoma. También es casi una realidad el proceso por el cual los vehículos se puedan registrar rutinariamente para un servicio, informando al garaje sobre lo que debe hacerse y programando sus propias actualizaciones de software.
IBM HABLA DE CUATRO TENDENCIAS CLAVE
En este contexto, IBM ha desvelado recientemente en la revista Forbes las que considera cuatro tendencias clave para el Internet de las Cosas, a través de una entrevista realizada a Bret Greenstein, vicepresidente de Watson IoT Consumer Business de la compañía.
Como ya habíamos avanzado, la primera tendencia es el papel fundamental que jugará la Inteligencia Artificial actuando como el cerebro que ejecuta los sistemas de IoT. A medida que más dispositivos se conecten y sean capaces de comunicarse entre sí, la AI más avanzará en cuanto a aprendizaje profundo, procesamiento del lenguaje natural, reconocimiento de imágenes y toma de decisiones impulsada por redes neuronales. Este desarrollo también contribuirá a que los dispositivos logren entenderse mejor con las personas.
Otra tendencia será impulsar la potencia de procesamiento “hasta el límite”. Elementos como las cámaras y los sensores tradicionalmente recopilan datos de forma pasiva, pero se prevé que este año habrá una mayor explotación de esta tecnología. “De repente, hay cámaras que no solo pueden ver, pueden entender la imagen y micrófonos que pueden escuchar, sino que cada vez son más llevados al límite”, señala Greenstein.
También se vincula el Blockchain al uso del IoT, ya que la cadena de encriptado parece muy adecuada para registrar detalles de los millones de transacciones que tienen lugar entre los dispositivos conectados. Los registros de Blockchain ofrecen seguridad en las interacciones entre IoT, ya que solo aquellos con las claves de cifrado pueden editar o modificar las secciones a las que tienen derecho. Además, las copias del registro se dividen en múltiples ubicaciones físicas, por lo que ninguna de las partes tiene control centralizado para manipularlo.
Por último, Greenstein prevé un crecimiento masivo de IoT en Industria, donde la tecnología inteligente y conectada continuará ayudando a los humanos en tareas manuales y especializadas.
OTRAS REFERENCIAS
Así será 2018 en Inteligencia Artificial, IoT, VR y AR y cloud (IT User)